Piscina en el jardín: Estas son las enfermedades a las que te arriesgas incluso con el agua limpia

Si bien las piscinas en los jardines son cada vez más recurrentes, gracias a que podemos encontrar en el mercado modelos que son fáciles de montar y que no requieren de obra, es muy importante tener cuidado con los gérmenes y las bacterias «invisibles a simple vista» que podrían representar un riesgo «muy peligroso para la vida» si no se limpian adecuadamente. Algo que cobra especial relevancia si tenemos en cuenta que son los niños los que más quieren usar siempre la piscina. Descubramos más sobre las piscinas en el jardín y las enfermedades a las que te arriesgas incluso con el agua limpia.

El riesgo de las piscinas para la salud

Comprar una piscina al aire libre no es sólo elegir el modelo importante u tener espacio para instalarla en nuestro jardín. Igualmente importante es el mantenimiento; Dado que las enfermedades transmitidas por el agua son más frecuentes en el verano, es extremadamente importante estar al tanto de las formas de mantener la piscina al aire libre limpia de enfermedades verdaderamente mortales.

Sin prestar mucha atención al estado del agua de tu piscina, pueden surgir enfermedades que van desde la Campylobacter más común, que provoca diarrea, hasta la enfermedad potencialmente mortal de la salmonella.

Para las piscinas infantiles inflables pequeñas, se recomienda vaciarlas diariamente para mitigar el riesgo de enfermedades y prevenir la propagación de gérmenes.

Incluso si no las usas con frecuencia, las piscinas a veces pueden atraer la naturaleza y, por lo tanto, el riesgo de enfermedades. Los gérmenes y las bacterias son invisibles a simple vista. Recomendamos la prevención en lugar de la cura . Sin embargo, los expertos aseguran que si el agua se ve limpia y no contiene desechos flotantes,  puedes usarla sin problema dos o tres veces antes de cambiar el agua.

Piscinas con filtro

Dicho esto, si tienes una piscina más grande con filtro, es importante controlar el uso de cloro y filtrarlo constantemente si es posible.

En este caso, los expertos creen que es mejor comprobar los niveles de pH de tu agua. Mientras estén lo más cerca posible de siete (o de hecho entre 7,2 y 7.6), tu agua debería estar bien.

Limpiar y desinfectar la piscina infantil

Después de drenar la piscina para niños al final del día, se recomienda limpiarla con agua dulce y dejar que se seque al aire de forma natural.

Por último puede ser también recomendable, desinfectar las superficies secas con una solución de lejía y agua, siguiendo las instrucciones del fabricante en cuanto a los tiempos y tamaños de lejía que desea usar, y luego enjuagar nuevamente con agua limpia.